La importancia del uso del casco para los ciclistas

El casco es uno de los elementos de seguridad más importantes para los ciclistas. Su uso puede prevenir o reducir la gravedad de las lesiones en la cabeza y el cerebro en caso de un accidente. Sin embargo, muchos ciclistas aún no lo usan o lo usan de forma incorrecta, lo que aumenta el riesgo de sufrir consecuencias fatales o irreversibles. En este artículo te explicamos por qué es tan importante usar el casco cuando montas en bicicleta, qué beneficios te aporta y qué tipos y marcas de cascos existen en el mercado.

¿Por qué usar el casco al montar en bicicleta?

La bicicleta es un medio de transporte ecológico, saludable y divertido, pero también implica ciertos riesgos. Según el INEI (Instituto Nacional de Estadística e Informática), cada año mueren entre 20 a 30 ciclistas en Perú por accidentes de tráfico, y muchos más sufren lesiones graves o discapacidades. La mayoría de estas muertes y lesiones se deben a traumatismos craneoencefálicos, que son la principal causa de mortalidad y morbilidad entre los ciclistas.

Si bien, el casco no está concebido para soportar impactos de vehículos de gran tonelaje y a gran velocidad, el uso del casco podría eventualmente hacer una diferencia en estos casos. Si ahora lo ubicamos dentro del contexto del propio ciclista, sin la intervención de vehículos motorizados, encontramos según un meta-análisis, que:

• El casco puede reducir las lesiones graves en la cabeza en un 60%.
• Puede reducir las lesiones traumáticas en el cerebro en un 53%.
• Puede reducir el número de ciclistas muertos por accidentes de tránsito o gravemente heridos entre un 10% a 34%.

Estos datos muestran que el casco puede ser un elemento esencial para proteger la cabeza y el cerebro de los ciclistas, que son las partes más vulnerables y vitales del cuerpo humano. El casco actúa como una barrera que absorbe y disipa la energía del impacto, evitando o minimizando el daño en el cráneo y el tejido cerebral. Así, se pueden prevenir o reducir las secuelas como hemorragias, fracturas, contusiones, edemas, conmociones o daños neurológicos que pueden afectar a la memoria, el lenguaje, la cognición, la personalidad o las emociones.

Además de proteger la cabeza y el cerebro, el uso del casco también tiene otros beneficios para los ciclistas, como:

• Aumentar la visibilidad y la identificación como ciclista ante los demás usuarios de la vía.
• Proteger la cabeza de objetos voladores, insectos, polvo o lluvia.
• Regular la temperatura corporal y evitar la pérdida  del conocimiento por exceso de calor o insolación.
• Mejorar la aerodinámica y el rendimiento deportivo.

¿Qué tipo de casco elegir?

No todos los cascos son iguales ni sirven para lo mismo. Existen diferentes tipos de cascos según el tipo de bicicleta, el tipo de actividad y el nivel de protección que se busca. Algunos de los tipos más comunes son:

• Casco urbano: Es el más adecuado para circular por la ciudad, ya que tiene una forma redondeada que cubre toda la cabeza y ofrece una buena ventilación. Suele tener colores llamativos o elementos reflectantes para mejorar la visibilidad.
• Casco de ruta: Es el más ligero y aerodinámico, ideal para los ciclistas que buscan velocidad y rendimiento. Tiene una forma alargada que favorece el flujo del aire y reduce la resistencia. Suele tener muchas aberturas para facilitar la refrigeración.
• Casco de montaña: Es el más resistente y robusto, pensado para los ciclistas que practican modalidades como el cross-country (XC) o cicloturismo rural. Tiene una forma envolvente que protege toda la cabeza, incluyendo la nuca y las sienes. Suele tener una visera para protegerse del sol o las ramas.
• Casco integral: Es el más seguro y completo, recomendado para los ciclistas que realizan actividades extremas como el enduro o el downhill que implican un alto riesgo de caídas e impactos. Tiene una forma similar a la de los cascos de motocicleta, con una carcasa que cubre toda la cabeza y la cara, incluyendo la mandíbula y el mentón. Suele tener una pantalla para proteger los ojos y un sistema de ventilación interno.

¿Qué son los cascos MIPS y por qué son mejores?

MIPS son las siglas de Multi-directional Impact Protection System, es decir, un sistema de protección contra impactos multidireccionales. Se trata de una tecnología que se incorpora en el interior de algunos cascos para aumentar su seguridad y reducir el movimiento rotacional del cerebro en caso de un golpe oblicuo.

El movimiento rotacional es el que se produce cuando la cabeza recibe un impacto en ángulo, lo que provoca que el cerebro gire dentro del cráneo y se estire o se desgarre el tejido cerebral. Este tipo de impacto es muy frecuente en los accidentes de bicicleta y puede causar daños graves o irreparables en el cerebro.

Los cascos MIPS cuentan con una capa intermedia que permite que el casco se deslice ligeramente sobre la cabeza en caso de un impacto oblicuo, lo que reduce el movimiento rotacional del cerebro y disminuye el riesgo de lesión. Según los estudios realizados por MIPS, esta tecnología puede reducir el movimiento rotacional del cerebro hasta en un 40%.

Los cascos MIPS son mejores que los cascos tradicionales porque ofrecen una mayor protección al cerebro ante los impactos más comunes y peligrosos que se producen al montar en bicicleta. Además, no afectan al peso, la comodidad o la ventilación del casco, ya que se trata de una capa muy fina y ligera que se adapta a la forma de la cabeza.

¿Qué marcas de cascos podemos encontrar en nuestra región?

Existen muchas marcas de cascos para bicicleta en el mercado. Algunas de las marcas más reconocidas en nuestro medio son Abus, Atom y Cairbull:

• ABUS: Es una marca alemana fundada en 1924 que se dedica a la producción de sistemas de seguridad para bicicletas, motocicletas y hogares. Sus cascos se reconocen por su fiabilidad, su funcionalidad y su diseño inconfundible. La calidad y durabilidad alemana no están ausentes de los productos de esta marca.
  De entre sus modelos, destaca el Macator MIPS, un casco de que se adapta a todos los recorridos y situaciones. El Macator MIPS cuenta con un cómodo acolchado y una buena ventilación con 5 entradas de aire y 8 de salida. Es un casco construido con la técnica de inyección en molde, de diseño ligero y estable por la unión duradera del EPS y el policarbonato. Tiene también una red anti-insectos y compatibilidad con el pelo recogido, ideal para personas con cabello largo.
  El peso de este casco está alrededor de los 300 gramos (talla M) y los 360 gramos (talla L) y cuenta con la certificación internacional de seguridad CE 1078 y la certificación alemana de seguridad VdS.
  Este casco puede encontrarse en las tiendas BICICENTRO, GBBIKES, distribuidores  y tiendas autorizadas.

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  ATOM: Se trata de una marca peruana con modelos y diseños de cascos muy atractivos y seguros que cuentan con la certificación internacional EN 1078, la que brinda garantía de que ha sido testeado con pruebas de impacto en ocho distintas formas de cabezas y sobre yunques planos y de borde, simulando los impactos sobre diversas superficies, como en el metal de los vehículos motorizados, paredes, postes y el suelo.
  De la marca ATOM destaca entre sus variados modelos el AT-152, un casco unisex con diseño de camuflaje y estilo moderno destinado para rutas Cross Country, cicloturismo rural. La carcasa posee un sistema de ajuste tridimensional para adaptarse al ancho y alto de la cabeza de quien lo porta.
  Los cascos ATOM pueden hallarse en las tiendas DISARVA, distribuidores y tiendas autorizadas.

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  CAIRBULL: Es una marca con origen y sede en China que se especializa en desarrollar, diseñar y fabricar cascos deportivos y cascos de seguridad de gran calidad. El campo de producción de estos cascos, además del ciclismo incluyen el esquí, el BMX, la escalada, el montañismo, la equitación y el rescate de alta peligrosidad.
  Sus modelos y diseños se han extendido de forma rápida y continua en varios países del mundo, especialmente por Latinoamérica. En Perú ya acumulan algunos años de gran aceptación entre los ciclistas de montaña y cicloturismo.
  De entre sus variados modelos, nos produjo especial atención el Supercross, un casco con protección trasera extendida para proteger la nuca, una visera ajustable atornillada, un acolchado antimicrobiano interno, ventilación para las cejas y protección extendida en los temples de la cabeza. Este casco cuenta con la certificación CE 1078 y la certificación CPSC 1203. Su peso oscila entre los 360 a 370 gramos.

Según la experiencia acumulada.

Entonces, el uso del casco es fundamental para los ciclistas, ya que puede salvarles la vida o evitarles lesiones graves en la cabeza y el cerebro en caso de un accidente. El casco actúa como una barrera que absorbe y disipa la energía del impacto, protegiendo el cráneo y el tejido cerebral. Además, ofrece otros beneficios como mejorar la visibilidad, proteger los ojos y la cara, regular la temperatura corporal y mejorar la aerodinámica.

A la hora de elegir un casco, es importante tener en cuenta la certificación del mismo, pues ello da cuenta de los materiales utilizados, la tecnología dispuesta y las pruebas mínimas necesarias que demuestran que el casco cumplirá su función en caso de algún incidente, el que siempre se espera que nunca suceda pero no debemos descartar el estar preparados.